25 julio 2009

XXXVI Premio Bancaja de Pintura, Escultura y Arte Digital



Ayer asistí a la inauguración de la exposición del XXXVI Premio Bancaja de Pintura, Escultura y Arte Digital que estará en la Sala de la Muralla del Instituto Valenciano de Arte Moderno [IVAM] hasta el 6 de septiembre.



Esta sala, por cierto, tiene una historia curiosa, pues no estaba contemplada en el proyecto arquitectónico del IVAM. Durante las obras del sótano se encontraron con los restos de una muralla y, para conservarla, se decidió crear una sala de exposiciones. Por este motivo, el acceso a esta sala es independiente y está en una fachada lateral, como podéis ver en la foto de arriba.



A concurso se presentaron un total de 1.354 obras: 804 obras se presentaron en la categoría de pintura, 298 en escultura y 252 obras compitieron en arte digital.

De todas las obras presentadas, el jurado seleccionó para esta exposición 49 piezas, de las que 29 corresponden a la categoría de pintura, 11 a escultura y 9 a arte digital. Posteriormente, premió 2 obras de cada una de las 3 disciplinas (además, hizo varias menciones honoríficas).







Cuando me comunicaron que estaba seleccionado me pidieron una explicación de la obra:

Dos rostros que son uno sólo.
Uno a cada lado. Frente y perfil.
Contrarios, extremos: uno frío, el otro caliente; uno racional, el otro apasionado; uno estático, el otro dinámico; uno piensa, el otro actúa.
Luchando, oponiéndose, debatiendo... para avanzar.
Dos estados latentes de significado que actúan simultáneamente.
Nunca desaparecen. Siempre están presentes. Ambos. Inseparables. Siameses.
Uno fracasaría sin el otro. Los polos opuestos se atraen necesariamente. Cuestión de supervivencia.
Y ahí siguen... Juntos, ordenados, sin revolver: como la luz y oscuridad, como el fuego y el agua, como el cielo y la tierra...
Dentro de ti.
Todavía.




El ambiente en el día de la inauguración fue muy bueno y las obras expuestas de gran valía artística. Las obras premiadas me gustaron en su mayoría aunque hay decisiones del jurado difícilmente comprensibles... Es el velo de subjetividad consustancial al arte.



En definitiva, contento por todo aunque los promotores podían haberse estirado un 'mijita' para convidar a los asistentes a buen un refrigerio y a unas deliciosas viandas. Así que mando unos azotes cibernéticos a la organización, que hacía un calor horrible y se hubiese agradecido mucho .



Haciendo click aquí iréis a la web oficial donde se puede descargar el catálogo de la exposición con información sobre todas las obras y sus autores.