01 mayo 2010

Acariciando aceras - 23



Te llevo para no irme

Acariciando aceras - 22



Camino, hambre, el color de mi sombra
Alfombra carmesí que ni recuerda ni me nombra
El sí porque sí, el no sé ser sin sentir tu calambre

Rocío de jardín en blanco y negro descuidado y silencioso
Aroma de café, palabras en el poso, la luz taciturna que arde
Sí y no a la vez densificando la bruma en la bruma del río

Cielo sin sol ni rayo que alimenta colores y quema
Yema del dolor que rasga caricias de soslayo
No sé por qué y sin saberlo no puedo ser pero se es

Basta así, de esa manera, para seguir prendiéndose
Saber perder para ganar y crecer en la apuesta muda de la bancarrota

Día descuartizador de noches, persecución de coches al atardecer
Energía que da el aliento que nunca se pierde ni se equivoca

Eres
Se es