¿Cual es la verdadera imagen del mundo? ¿Cual es su verdadera textura? ¿Cómo es en realidad? La respuesta es: depende de quién lo observe, qué clase de instrumentos utiliza, el momento en que lleve a cabo la observación y la clase de preguntas que se haga cuando realice la observación.
La imagen del mundo no es su aspecto. Es nuestro modo de verlo.