11 abril 2010

De otra manera que la noche no puede imaginarse



[...]
Y luego levantémonos más tarde,
como domingo. Que la mañana plena
se nos vaya en hacer otra vez el amor,
pero mejor: de otra manera
que la noche no puede imaginarse,
mientras el cuarto se nos puebla
de sol y vecindad tranquila, igual que el tiempo,
y de historia serena.

[Fragmento de 'Canción de aniversario', de Jaime Gil de Biedma]