10 septiembre 2010

Listen, listen...



Finding a base
To grow up smart

There's nothing
Like being far away from home to understand
How it's like

Even the phone calls didn't work
Future plans, success and glory?

Blows your mind,
Blows your mind

Strange days have found us
We have to let them go
Next time, next time we're here

Ready, ready, ready
for so long ready

So I feel like a walk,
That's when I walk
So I sleep not,
But I continue dreaming,
Dreamy dreaming

So I'll wait for the desert
And I'll wait for us,
Yes, I'll wait for us
Future and past

And I'll wait for the tide
And I'll wait for us
Yes, I'll wait for us
Future and past

Listen, listen...

I'll wait for the desert
I'll wait for us
I swear to God I'll wait for us

When you realize
I'll wait for the summer day
I'll wait for the tide to stay
I'm waiting for glory
Not much of the story

Drop in my eyes
Drop in my eyes
Drop in my eyes
Drop in my eyes

So I fell like a walk,
That's when I walk
And I sleep not
But I continue
I continue, I continue
I continue...

So I fell like a walk,
That's when I walk
And I sleep not
But I continue
I continue, I continue
I continue...

[Najwa Nimri - I'll wait for us]

Acariciando aceras - 78

Si me paro
puedo dar color

en la luz
a mi sombra

en la oscuridad
a mi alma

08 septiembre 2010

La sabiduría de dividir la vida en días



El mar sólo es un conjunto de olas sucesivas, igual que la vida se compone de días y horas, que fluyen una detrás de otra. Parece una división muy sencilla, pero esta operación, incorporada a la mente, ha salvado del naufragio a innumerables marineros y ha ayudado a superar en tierra muchas tragedias humanas. Recuerdo haberlo leído, tal vez, en alguna novela de Conrad. En medio de un gran temporal, el navegante piensa que el mar encrespado forma un todo absoluto, el ánimo sobrecogido por la grandeza de la adversidad entregará muy pronto sus fuerzas al abismo; en cambio, si olvida que el mar es un monstruo insondable y concentra su pensamiento en la ola concentrada que se acerca y dedica todo el esfuerzo a esquivar su zarpazo y realiza sobre él una victoria singular, llegará el momento en que el mar se calme y el barco volverá a navegar de modo placentero. Como las olas del mar, los días y las horas baten nuestro espíritu llevando en su seno un dolor o un placer determinado que siempre acaba por pasar de largo. Cuando éramos niños desnudos en la playa no teníamos conciencia del mar abstracto sino del oleaje que invadía la arena y contra él se establecía el desafío. Cada ola era un combate. Había olas muy tendidas que apenas mojaban nuestros pies y otras más alzas que hacían flotar nuestro cuerpo; algunas llegaban a inundarnos por completo con cierto amor apacible, pero, de pronto, a media distancia de nuestro pequeño horizonte marino aparecía una gran ola muy cóncava adornada con una furiosa cresta de espuma que era recibida con gritos sumamente excitados. Los niños nos preparábamos para afrontarla: los más audaces preferían atravesarla clavándose en ella de cabeza, otros conseguían coronarla acomodando el ritmo corporal a su embestida y quienes no veían en ella una lucha concreta sino un peligro insalvable quedaban abatidos y arrollados. Con cuanto placer dormía uno esa noche con los labios salados y el cuerpo cansado, abrasado por el sol pero no vencido. La práctica de aquellos baños inocentes en la orilla del mar es la mejor filosofía para sobrevivir a las adversidades. El infinito no existe, el abismo sólo es un concepto. Las pequeñas tragedias de cada día se componen de olas que baten el costado de nuestro navío. La única sabiduría consiste en dividir la vida en días y horas para extraer de cada una de ellas una victoria concreta sobre el dolor y una culminación del placer que te regale. Una sola ola es la que te hace naufragar. De esa hay que salvarse.

['Las olas', extraído de 'El cuerpo y las olas', de Manuel Vicent]

07 septiembre 2010

El cuerpo y las olas

Día a día, ola a ola es como el cuerpo llega feliz a la orilla.
[Manuel Vicent]



[Ulises y las sirenas - Pablo Picasso]

Un jardín en el mar



Una casa en el cielo
Un jardín en el mar
Una alondra en tu pecho
Un volver a empezar

Un deseo de estrellas
Un latir de gorrión
Una isla en tu cama
Una puesta de sol

Tiempo y silencio
Gritos y cantos
Cielos y besos
Voz y quebranto

Nacer en tu risa
Crecer en tu llanto
Vivir en tu espalda
Morir en tus brazos

[Cesária Évora - Tiempo y silencio]

06 septiembre 2010

Pecando sin pensar en lo bueno

Puedo acariciar tu voz, ser tu desierto
y mirarte horas enteras
Puedo acercarme a vos y no ser tan terco
Pisando la basura del puerto

Desde el mar no hay piedad si vos no te mojás
Se cansó la ansiedad, la pena y el dolor

Puedo desestructurar todo tu misterio
Pecando sin pensar en lo bueno
Amarrarme a tu sol, ser más sincero
En medio del calor de febrero

Y contar cada luz que nos hace temblar
Desnudar la canción para vestirte hoy

Puedo descontracturar todo tu veneno
Y hacerlo caracol en el suelo
No parar de festejar cada fragmento
y darme el gusto de que sea nuestro

Despertar en el mar y ser la espuma gris
Desnudar la canción para vestirte hoy

[Lisandro Aristimuño - Para vestirte hoy]

Existir y crear

Vivir no es sólo existir
sino existir y crear,
saber gozar y sufrir
y no dormir sin soñar.
Descansar es empezar a morir.

[Gregorio Marañón]

Gracias por compartirlo, Almudena.



[Pintura de Pablo Palazuelo]

03 septiembre 2010

Poesofía: ver [Poesofema 61]

¿Cuántos pájaros deben caer del cielo
para que nuestras lágrimas se eleven
para que olvidemos adular las formas
para que obedezcamos la orden inaudible
para que soltemos lo que tenemos empuñado
para que metamos la cabeza en el hocico
y cesemos de recorrernos en lugar de ser?
¿Dónde está el infierno prometido,
dónde las llamaradas del instante,
dónde la palabra convertida en alma,
dónde los leones que se elevan
mientras mil alas de metal caen del cielo?
¿Obtendremos la humildad del perro, lo leve de la brisa?
¿Cesaremos de vivir como una esfera flotando en el abismo?
¡Que lo sublime despegue de nuestros pasos las huellas ajenas!
¡Que se haga la luz en la oscuridad carente de significado!
¡Que un silencio con olor a sándalo invada la farsa del parecer!
¡Que nuestro corazón eche raíces en las cuatro esquinas del cosmos!
¡Que un rugido celestial recorra nuestros huesos cual un tren sin frenos!
¡Que el ladrido de los puercos convierta en lirios a nuestros tímpanos!
¡Que de la herida que corona a nuestra memoria mane un géiser de oro!
¡Que bajo la noche como un perro diurno devore el instante hasta agotar su miel!
¡Basta ya de bucear en túneles de gelatina amarga!
¡Basta ya de espejos arrogantes!
¡Basta ya de tanta boca huérfana
de pantanos vestidos de profeta
de vino estéril con sabor a yegua
de morder un pan hecho de sangre!
¿Nos enseñó la vida a deshacer los nudos?
Nos desprendemos de las máscaras de héroe
de las sombras que arrastran nuestros talones
de la aureola que aún nos ata a santos de barro
Cuando el gallo sagrado suspire en el último punto
el Arcano se abrirá desde adentro como una rosa blanca
en el centro de nuestro pecho cantará una virgen de plata
extraeremos de cada ojo de mármol una mirada cálida
cesaremos de criticar para que el alma onírica se extienda
aceptaremos que la piedra es piedra no importa quien la lance
admiraremos la flor que se marchita tanto como la que se abre
en la materia que fluye hasta su desintegración
nuestra conciencia impulsará lo intangible
hacia el sacrificio de los espejismos
poblaremos con ilusiones la ansiedad del alba
sembraremos diamantes en la estela del tiempo
nuestra alma que nació ciega
se cubrirá de ojos que no temen ver

[A. Jodorowsky]

Acariciando aceras - 77

como un milenario
río cansado
de correr el agua
de contenerla
así...
tan agotado
y vacío
que sólo tiene
calma

Grabando mi nombre en una bala - 14

La infelicidad no tiene nada que ver con una causa exterior, es una decisión interior. Si quieres seguir siendo infeliz, puedes serlo, sea cual sea la situación. Y también es verdad lo contrario. Si decides ser feliz, dichoso, celebrar, puedes serlo, independientemente de las circunstancias. Lleva tiempo darse cuenta de eso, porque al ego le resulta cómodo pensar que son los demás los que te están haciendo infeliz.

[Osho]