Aquí lo tenéis:
Incertidumbre y Dopamina
Ayer en Redes vi la redifusión de este episodio, en el que Punset hablaba con Robert Sapolsky.
En la entrevista, decían que generamos más dopamina en aquellos instantes anteriores a la consecución de lo que estamos buscando.
Es lo que Punset llama "la antesala de la felicidad" en su libro Viaje a la Felicidad.
Algo que me llamó la atención fue un equilibrio del que hablaba Sapolsky en cuanto a incertidumbre se refiere.
La dopamina parece estar detrás de esa sensación de euforia que se experimenta justo antes de lograr un objetivo.
Extracto de la entrevista
Eduard Punset:
Es increíble, ¿no?
Robert Sapolsky:
¡Lo es! Antes hablábamos de la dopamina. La dopamina tiene que ver con el placer, se creía que, cuando consigues una recompensa, esta parte del cerebro segregaba dopamina… resulta que esto es un error. No se trata de la recompensa, sino de la anticipación de la recompensa…
Robert Sapolsky:
…Todo reside en la capacidad de anticipación, ahí es cuando sube la dopamina. Mira, recuerdo un amigo mío de la universidad que tenía una de las visiones más cínicas del mundo, pero que encaja con esto hasta cierto punto, solía decir:
«una relación es el precio que hay que pagar por haberlo deseado tanto».
Eduard Punset:
Una relación estable
Robert Sapolsky:
Sí. Es como… si ya supiera lo que hacía la dopamina. Pero hay algo incluso más interesante que se descubrió en un estudio fantástico hace un par de años. Muy bien, la rata presiona la palanca y ahora obtiene la recompensa, todo igual, sólo que ahora hacemos algo diferente. En lugar de facilitar la recompensa una vez se ha hecho la tarea, ahora hace la tarea y consigue la recompensa sólo un 50% de las veces.
Eduard Punset:
Ya veo…
Robert Sapolsky:
Se introduce cierta incertidumbre. Y lo que se observa es que, ¡justo después de presionar la palanca, hay un aumento de dopamina como nunca antes se había visto, en la química cerebral, justo hasta el momento en el que la rata descubre si consigue o no la comida! Es decir: cuando se incorpora la dosis justa de «quizás», es incluso mejor que cuando se trata de «¡ahí viene sin duda!»
Eduard Punset:
¡Dios mío!
Robert Sapolsky:
Lo que hay que hacer, según demuestran estos estudios, es mantenerlo justo sobre el 50%. Con un 25% ó 75% no se consigue un aumento tan grande de dopamina. Si se llega justo a este punto de incertidumbre, el cerebro dice: «¡esto será genial! ¡Ahí viene! No, ¡tal vez no venga! No lo sé; ¡pero hoy me siento afortunado…!» Es mera anticipación. La gente que estudia el estrés, la psicología del estrés, siempre recalca que si sientes que no tienes control, te sientes muy estresado. ¡Pero hay un contexto, sin embargo, en el que tener poco control, las máximas leyes de la imprevisibilidad, sienta genial! ¿Cuál es la diferencia? ¡Porque en este contexto te sientes optimista! Lo percibes como un entorno benévolo. «Posiblemente todo saldrá bien, y si no es esta vez será la próxima…» y ese «quizá» es tal vez lo más increíble que te puedas imaginar. Cuando salió este estudio, se comentó cuánto nos ayuda esto a entender la adicción y el juego…
Esto aplicado a gestión de proyectos, donde lo que se busca es reducir ese grado de incertidumbre al máximo como encaja?
En la fase inicial, en la definición de proyectos, influirá este estudio en la selección final realizada?
Este proyecto,¡ tal vez lo termine tal vez no!.
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