04 abril 2010

Extender las manos



No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.

No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.

Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños

Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.

[Mario Benedetti - No te rindas]

2 comentarios:

Sharli Fly Clown dijo...

Leñe con el Benedetti! Qué valiosas palabras nos dejó.

Has probado a leerlo de abajo a arriba?


Saludos (y esa servesita campestre?)

Víctor Marín dijo...

Acabo de leerlo ahora mismo de abajo a arriba y... te das cuenta de cómo las palabras de un genio encierran mucho más significado de lo que aparentan.

Gracias por aportarme esa otra visión vertical.

La cervecita campestre es cuestión de... ya! No? ;)

Espero verte pronto. Un abrazo.