10 agosto 2011

Acariciando aceras - 100



Hasta las tantas...
¿Qué hacer con estas ganas de ti?

El silencio es tan denso
sube por la espalda
hasta la garganta de las canciones
tan fluido que cala las paredes
y grita en los colchones

¿Cuánto más?
¿Cuántas más?

También es mi cuerpo
el que se mueve buscando calor
el que arde en cada contacto
el que crea con electricidad dinámica
el que quiere estrellarse en fluidos
y mi cuerpo soy yo
y yo soy más que mi cuerpo

La próxima vez que me encuentre contigo
me alejaré de ti y de mí
con chascarrillos de bufón siniestro
con medias verdades de vendedor ambulante de cementerios
con máscaras del carnaval de Venecia basadas en Michael Jackson
y con bailes de salón sobre lápidas de personas que murieron tristes siendo honestas

O quizás lo haga todo más breve
y te regale mis ojos y me marche a tientas

Todo puede ser mucho menos dramático
y más leve
...

¿Todo?

¿Cuántas cosas te hacen temblar?

quisiera mirarte
y escucharme en susurros
sin salirme de vicio
sin que nada dentro de mí se salga de quicio
ni destroce a gritos nuestro reflejo en los escaparates
y nos empuje al precipicio

¡qué calor!
¡qué intenso y pegajoso!
potencia todos los aromas de mi cuerpo

son más yo en los cinco sentidos

y ahora ¿qué?

redobles de tambor

[realmente
¿es todo así de dramático?
me siento nublado por esta rima de inclasificables
que llamamos poesía]

[la poesía
como el arte
está abocada al fracaso de la utilidad
es aspirar a lo imposible
es tratar de expresar lo inexpresable
por eso nos maravilla]

[una palabra de tus versos
poesía
y mi vida será tuya]

2 comentarios:

mafalda dijo...

Estas palabras... son un ejemplo claro de lo que puede hacer temblar a una persona...
Las acabo de hacer mías y ahora no tengo palabras, solo hay silencio... y tiemblo, toda yo tiemblo...

Besos mudos, temblorosos.

Víctor Marín dijo...

... dejarse llevar por el mar y la luna hasta recostarse en la calma...