
te observo, belleza
me sumerjo en ti, me empapo
me esponjo en tu pureza
siento la punzada de tu peso
me cuelgo en ti
consciente de mi dependencia
lo acepto
permito que escuezas
me entrego de frente a tu frente
me acoges, me nutres y después me demueles
eres un hilo de voz afilada y limpia
que taladras
como si todos mis poros fueran oídos
desde que tu timbre empieza
siempre llegas a mis centros
siempre eres extrema
eres aliento caliente
me decapas hasta los huesos
disuelves mis impurezas
abres mi pecho y escarbas
buscas y encuentras
a mis vírgenes violas
cuando están hambrientas
las rozas y las quemas
las desangras pieza a pieza
me rindo
exhausto, impotente
callada e inmóvil
mi presencia
belleza
tan limpia y pura
que dueles
y amo
como a ti, sol que quiero observar y no puedo
tus rayos certeros
siembran en mi mirada fugaces luceros
verdes, naranjas, violetas
que de tu luz son huella basta, remedo
como a ti, agua que quiero abrazar y te escapas
burlando a mis brazos y a mis manos
como a campos vacíos llenos de agujeros
que nada contienen ni atrapan
como a ti, viento que quiero cabalgar y no agarro
escurres los impulsos que te lanzo
los haces bajos, tardíos, pesados
lentos como gigantes de barro
como a ti, horizonte que quiero alcanzar y no llego
aniquilas mis pasos bajo mis pies
escondes mapas, caminos, piedras, polvo
todo avance es para luego
como a ti
que tu cuerpo es agua
tu imagen sol
y tus caderas ya son viento
como a mí
por eso anduve y ando
y para continuar caminando
me transformo en el horizonte
te integro
fenómeno natural, accidente geográfico
lo que quiero ser
sin dejar de ser
nada psicopático